Unicoornrosa
A finales de 1930 el matemático y profesor de la Universidad de Columbia Edward Kasner estaba buscando una cifra para ilustrar la diferencia entre un número inimaginablemente grande y el infinito. Pensó en un uno seguido de cien ceros. Tenía que ponerle nombre así que le pidió a su sobrino de nueve años que le sugiriera una palabra. El niño, que era lector de unos cómics protagonizados por el personaje Barney Google, le dijo: “¡Google!”. Pero el matemático la cagó al escribirla y unos años más tarde publicó su libro “Las matemáticas y la imaginación” donde introducía el número: googol.
Casi 70 años más tarde, un estudiante de la universidad de Stanford llamado Larry Page, estaba con su compañero Sean Anderson pensando nombres para la herramienta de indexación que estaban creando. Sean sugirió la palabra "googolplex" (que es como un googol pero más grande), y Larry respondió con la forma abreviada, "googol". Sean estaba sentado delante de su ordenador, así que buscó si el dominio estaba disponible. Pero se equivocó al escribirlo, y en vez de buscar el nombre “correcto” Googol.com, escribió Google.com. Y así se quedó, haciendo finalmente justicia a lo que le había venido a la mente a aquel niño 70 años antes.
Os explico todo esto porque hoy le he pedido a mi hija Valentina de 5 años que se invente una palabra para dar título a esta primera newsletter de “No es asunto vuestro” en abierto. A ver si así nos pasan cosas buenas. :-)
La primera en abierto
Si eres nuevo o hace tiempo que no te pasas por aquí, déjame que te resuma brevemente lo que te encontrarás: envío esta newsletter cada martes a las 7 de la mañana. Hasta ahora, estaba incluida en la suscripción premium, pero algunos suscriptores me han sugerido que la ponga en abierto. Creen que será una buena forma de dar a conocer más “No es asunto vuestro”. Ya veréis que siempre os hago caso...
En estos emails hago un seguimiento de mis proyectos y de los episodios de los podcasts y también intento compartir todo aquello que me voy encontrando y me parece interesante como herramientas que utilizo, tips que voy descubriendo mientras emprendo, recomendaciones personales y algún secreto que solo se puede explicar por email. Por ejemplo, como este:
La noticia de que Twitter está apunto de lanzar los super follows me recordó mi primer gran fracaso tecnológico. Fue una aventura estrepitosamente fallida que creo que nunca he explicado en detalle. La semana que viene os la explico.